Singladuras por la ciudad líquida I

Imposible reconocer la Iglesia de San Geremia por la fachada, ahora oculta, tampoco por la cruz en la linterna sobre la cúpula. Sabrás que dentro están las reliquias de Santa Lucía porque un turista español lo dice a viva voz a su pareja. No te vendría mal algo más de vista, piensas, víctima de la presbicia. Pero el cartelón sí lo ves. La publicidad financia hoy las obras de restauración de las innumerables iglesias. Ayer era un cartelón de Cartier en la Basílica de Santa Maria della Salute. ¿ La sobriedad interior del templo sagrado desdecirá la lujosa ropa del exterior?

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